miércoles, 24 de noviembre de 2010

Activistas de Greenpeace "asaltan" plataforma petrolera de Pemex "

A bordo de una lancha rápida, cuatro activistas de Greenpeace llegaron hasta la plataforma de aguas profundas PetroRig III o Centenario, localizada a 100 kilómetros de la costa de Veracruz, en la Zona Económica Exclusiva de México, parea exhibir un mensaje al Gobierno de México en el que exigió detener los proyectos de exploración petrolera en aguas profundas.

Activistas de Greenpeace "asaltan" plataforma petrolera  de Pemex

Activistas de Greenpeace llegaron a la plataforma de exploración Centenario de Pemex, donde enviaron mensaje a la COP16. Foto vía Greenpeace / Prometeo Lucero

GOLFO DE MÉXICO.- "Stop deepwater oil drilling" (detengan la perforación en aguas profundas) y "petróleo = cambio Climático" fueron algunos de los mensajes que desplegados en mantas los activistas instalaron en la plataforma petrolera de Pemex, como mensaje a todos los países del mundo que se reunirán en la décimo sexta conferencia de Naciones Unidas sobre cambio climático (COP16) de Cancún.

“Este lugar prueba la incongruencia entre el discurso de Felipe Calderón, quien constantemente afirma que busca dar una lucha contundente contra el cambio climático... La exploración de petróleo en las aguas profundas del Golfo de México es un riesgo innecesario que aumentará la responsabilidad de México en el problema del cambio climático", señaló Gustavo Ampugnani, coordinador de la campaña de clima y energía de Greenpeace México.

Agregó que si tales exploraciones llegaran a encontrar petróleo, la extracción de aguas profundas distraerá aún más la atención de las soluciones reales al cambio climático, como lo son las fuentes renovables, limpias y sustentables de energías y las medidas obligatorias de eficiencia energética.

Por su parte Alejandro Olivera, coordinador de la campaña de océanos de Greenpeace México, a bordo del barco Arctic Sunrise destacó que “México debe de ir más allá de ser sede de la próxima conferencia, debe tener la calidad moral para organizarla. Estas plataformas simbolizan un futuro adverso para el clima y los ecosistemas marinos del Golfo, además de que son la prueba de la contradicción que existe entre un discurso gubernamental que se rasga la vestiduras por el cambio climático y una realidad irrefutable: al gobierno de México le interesa más el petróleo que detener el cambio climático”.

PetroRig III, renombrada Centenario, es una plataforma petrolera semisumergible diseñada para perforar en aguas ultraprofundas (hasta 2,134 metros), y fue contratada por Petróleos Mexicanos para operar en aguas profundas desde julio de 2010 hasta julio del 2015; su renta diaria es de 495 mil dólares.

“México está a punto de hospedar la 16° conferencia de cambio climático y esto es lo que tiene para mostrar al mundo: una política energética totalmente basada en combustibles fósiles y en la extracción de petróleo de fuentes cada vez más inaccesibles y con mayores costos”, dijo Olivera.

Desde el sexenio anterior, el programa de aguas profundas se convirtió en uno de los proyectos estratégicos para el gobierno federal. En total, hay por lo menos cuatro plataformas rentadas por Pemex Exploración y Producción (PEP) para el periodo de 2008 a 2016, para explorar las áreas de la sonda de Campeche, Coatzacoalcos y Perdido.

Para ello, Petróleos Mexicanos ha destinado una inversión total de 40,685 millones de dólares. Cabe señalar que la mayor parte de los lugares en los que se ha hecho exploración han arrojado yacimientos de gas, de petróleo extremadamente pesado o bien nada. Encontrar petróleo en yacimientos a miles de metros de profundidad en el Golfo de México significará entrar de lleno a la era del petróleo altamente costoso, ambientalmente inviable y de mala calidad, dijo Greenpeace.

La exploración y extracción de petróleo en aguas profundas supone riesgos innecesarios. En abril pasado con la explosión de la plataforma Deepwater Horizon, el Golfo de México fue víctima -una vez más- de lo que significa la extracción de petróleo de aguas profundas: derrames, afectación a ecosistemas marinos, pérdidas a las economías costeras.

Antes de eso, el Golfo sufrió uno de las más graves desastres petroleros de la historia: la explosión del pozo Ixtoc I, en la Sonda de Campeche, en la que más de 3 millones de barriles de crudo fueron vertidos al mar durante 280 días.

Esta tragedia era considerada la más grave de su tipo en la historia, pero quedó rebasada por la explosión de la plataforma Deepwater Horizon, de British Petroleum (BP), el 20 de abril pasado. En sólo tres meses, BP vertió 4.9 millones de barriles al mar.

“El caso BP puso en evidencia no sólo la falta de capacidad técnica para prever y hacer frente a una emergencia en aguas profundas, sino la voracidad de las empresas, que sacrifican seguridad a cambio de ganancias. En México ni siquiera existe una regulación sobre el tema. Si algo sale mal ¿quién se hará cargo? ¿a quién responsabilizar? A duras penas Pemex mal responde a los constantes derrames en Tabasco o Veracruz. Si México no abandona desde ahora su inversión en aguas profundas, no podrá emprender el viraje hacia el uso de fuentes renovables de energía y tendrá que enfrentarse, sin respaldo alguno, al colapso por el agotamiento de este combustible”, agregó Ampugnani.

Fuente: http://www.bionero.org/cambio-climatico/activistas-de-greenpeace-asaltan-plataforma-petrolera-de-pemex

miércoles, 10 de noviembre de 2010

El deterioro del medio ambiente puede generar conflictos bélicos

El ejército canadiense se está preparando para intervenir en cualquier lugar del mundo ya que, según informa un documento interno del propio organismo militar, el cambio climático provocará la lucha entre los estados por el control de los recursos naturales, violentas guerras regionales y continuas catástrofes naturales.
La lucha contra el cambio climático no es una prioridad del actual gobierno canadiense, presidido por Stephen Joseph Harper, quien en varias ocasiones ha sido acusado de entorpecer las negociaciones internacionales sobre la cuestión. Sin embargo, el ejército canadiense encara el tema de una forma totalmente opuesta y prevé la peor de las situaciones.

Estas revelaciones provienen de un documento de 176 páginas denominado "El Contexto de la futura seguridad 2008-2030", aprobado en enero de 2009 por el estado mayor y obtenido por el periódico canadiense Le Devoir. El informe es un resumen de las futuras amenazas y de las posibles intervenciones militares en los próximos años.


Entre los numerosos factores de desestabilización del planeta para los próximos 20 años, el cambio climático ocupa un capítulo completo del informe. "En todo el mundo tendrán lugar fenómenos meteorológicos cada vez más violentos y cada vez más vinculados al cambio climático que exigirán intervenciones militares, desde misiones de socorro a las víctimas de catástrofes naturales hasta operaciones de estabilización a gran escala", escriben los especialistas que, en algunas ocasiones y para verificar sus conclusiones, recurrieron a la ayuda de diversos expertos universitarios.

Las fuerzas canadienses estiman que la lucha entre los estados por el control de recursos tales como el agua y los alimentos se llevará a cabo esencialmente por vía diplomática, con alguna excepción: "Es muy posible que ciertos estados actúen de forma diferente, agresiva e irracional para defender sus intereses egoístas", se puede leer en el informe.

El informe prevé en países frágiles luchas internas por el control de los recursos, especialmente en forma de guerrillas. En un periodo de 20 años los problemas medioambientales, así como la escasez de agua y de alimentos, supondrán un riesgo de desestabilización en regiones enteras. "Podría ocurrir que las presiones causadas por las migraciones y los flujos de refugiados o de personas desplazadas conllevaran un recrudecimiento de las tensiones étnicas, religiosas o territoriales, inestabilidad y, posiblemente, el hundimiento de los estados. Estos efectos se manifestarán en primer lugar en las zonas costeras, donde habita el 75% de la población mundial, en especial entre los grupos de personas, los sectores de la economía y las localidades sensibles a las variaciones climáticas desde el punto de vista económico o ecológico".